Hemos perdido el norte, nuestros faros.
Hemos construido una sociedad de fríos
cadáveres que caminan vestidos de Chanel. Ciegos, sordos y, a veces, incluso
mudos.
La ceguera social es tal que el ser humano
pasa su tiempo vital sin avanzar en su materia: ser creadores.
En la universidad
mejor diseñada y aun lejos de nuestro entendimiento, la creación, la propia
vida. Multidimensional, completamente adaptada a los diferentes grados de
conciencia y todos co-existiendo a la vez.
Es,
verdaderamente, toda una obra maestra.
Hay un motor de avance claro, AMOR-MIEDO.
Un juego dual que nos despista
constantemente.
Superar los diferentes miedos o avanzar en
grados de amor, lo cual, es lo mismo nos hará ir avanzando en grados de conciencia
y conocimiento multidimensional. Algo completamente incomprensible para aquel
que vive sumergido en el “miedo”.
Así que, para qué intentar explicarlo.
Primero supera tus miedos, luego ya iremos avanzando en esto de la
espiritualidad.
Anoche leía una frase de Osho:
Convertirse en AMOR es a lo máximo que puedes
aspirar. Si te conviertes en AMOR te conviertes en lo Divino.
Amor y Miedo dos imposibles a la vez. No
entran juntos en la misma habitación y nuestras relaciones, sean del tipo que
sean, están llenas de miedo.
Construir una sociedad sana en este punto
histórico no es tarea fácil. Una humanidad que se desarrolla bajo el yugo del
miedo no genera faros, guías, es decir, nuestros ancianos llegan a la vejez
completamente derrotados, ciegos y los que deben guiar a los nuevos están en un
rumbo completamente errado.
Es difícil retomar el camino, pero nos toca a
los jóvenes despiertos, almas muy evolucionadas, alzar la voz y encender al
máximo nuestra luz de la SABIDURÍA. La Luz del Ser, la Luz del AMOR. Esa
palabra que casi nadie puede o sabe pronunciar porque el miedo los invade.
En una
sociedad avanzada los ancianos son sabios. Chamanes, chamanas, Guías,
Sabios, Sanadores. Altamente cualificados para enseñar a los nuevos. Con un
estado de salud óptimo. Absolutamente RESPETADOS ya que albergan la llama de la
sabiduría en su interior.
Mira en los ojos de un gran Chaman o Sabio o
Maestro, la llama de la sabiduría llena su mirada. Sus ojos contienen la
TOTALIDAD.
En la sociedad actual los ancianos se han convertido
en un estorbo. Una vejez digna es estar bien cuidado por médicos,
enfermeras…..estar en las mejores residencias o asilos. Tener una lista
interminable de medicamentos que minan su organismo y alimentan a grandes
multinacionales.
Una vejez digna…….estar muerto en vida.
Mira los ojos de nuestros ancianos. Solos,
tristes, completamente apagados y apartados de la sociedad, salvo excepciones.
Llenos de pena y temor y viendo que han
perdido su tiempo de vida, su “tiempo de encarnación”.
ES TIEMPO DE TRANSFORMACIÓN
CON ABSOLUTA DETERMINACIÓN.
Saliendo de la
duda, la dualidad. Es tiempo de HACER.
Caminamos hacia una sociedad SANA.
Restablecer el orden natural interno del ser. A despertar nuestras cualidades y
capacidades naturales autosanación, empatía-telepatía,… Despertar la capacidad
de crear un orden adecuado para el desarrollo de cada ser respetando el orden
natural de todos los reinos (animal, vegetal, mineral..)
Lo que ocurre en nuestro planeta es de
absoluta importancia en el orden cósmico. ¿Acaso no puede una sola célula
enferma derrotar un organismo completo?
En el universo ocurre lo mismo. Es un
organismo vivo y todo lo que ocurre en cada una de sus partes repercute en la
totalidad.
Estoy sentada en la playa donde aprendí a
nadar. Con 4 o 5 años me empeñé en aprender a nadar con un hipopótamo rosa
inflado alrededor de mi cintura. Hasta que me desprendí de él y aprendí a nadar
sola.
Estuve muchos años enfadada con este lugar
por la gran contaminación de sus aguas. Residuos químicos de varias industrias
desprendían un olor muy desagradable que llegaba hasta la playa.
Aprendí a nadar en aguas turbias o lo que es
lo mismo, en emociones densas y a desenvolverme con facilidad en ellas.
En mi camino, en mi recorrido he aprendido lo
mismo a flotar, nadar y salir del dolor y no solo eso: a transformarlo en AMOR.
De un tiempo a esta parte he vuelto a este
lugar amado para mí. Donde pasaba todos los veranos con mis padres y hermanos.
Donde me escondía entre las rocas para cantar sola y sentir…..
Espero ver con mis ojos completamente purificado
el agua de esta ría y mis playas. Ver sus aguas llenas de AMOR. Purificadas así como es ahora en mi interior.
La purificación, El Sirat, estamos pasando
ahora por ese fino puente, por el agujero de la aguja y sólo los puros de corazón
verán la luz, lo demás seguirán viviendo en tinieblas y por un tiempo lo
veremos todo manifestado a la vez hasta que la densidad quede completamente
bañada por la luz de la conciencia del SER.
Entonces habremos recuperado nuestros faros. El
equilibrio de la humanidad.
Bless you with love,
Ruth.